Video. Turista graba su propia muerte por un accidente en Brasil
Dramático accidente mortal en Ceará, Brasil, donde un turista de 39 años ha muerto mientras se grababa en vídeo subido a una tirolina. Su mujer, que justo instantes la había utilizado también, se encontraba en el otro extremo grabando igualmente el momento desde otra perspectiva. El hombre, que cayó repentinamente impactando contra el suelo, murió de camino al hospital; una nueva tragedia en Brasil, donde algunos todavía lloran la reciente muerte de la influencer Lara Cleaver tras un aparatoso accidente en el que su hermana, Dara, también resultó herida.
La víctima ha sido identificada como Sergio Murilo Lima de Santana, quien se encontraba de vacaciones por el país y, en aquel aciago día, decidió subirse a una atracción consistente en una tirolina que llevaba de un punto a otro atravesando unas dunas. Sonriente y ya colgado en lo alto, el treintañero estaba grabando el momento con un rostro de felicidad cuando, de pronto, todo cambiaría de forma abrupta en un fatal giro del destino.
Mientras su esposa había usado la misma tirolina instantes antes, completando con éxito el periplo de un lado al otro, Sergio Murilo, cuando parecía ir por la mitad del trayecto, fue víctima de la fatalidad: el cable de la tirolina venció, dejando al turista en una caída libre que provocó que impactase violentamente contra la superficie.
Desde el otro lado, la mujer, que también captaba en vídeo el suceso, contempló horrorizada el accidente, echando a correr inmediatamente en busca de Murilo.
Pese a que el hombre fue trasladado con urgencia al hospital, la gravedad de sus heridas era tal que ni siquiera llegó vivo al centro de salud, muriendo en el camino pese a todos los intentos de los sanitarios por reanimarle.
Ahora, un abogado de la familia, tal como recoge el medio brasileño Globo, ha anunciado que han presentado una denuncia por negligencia al dueño de la tirolina. Según señalan, la viga de apoyo se derrumbó durante el descenso, provocando la caída que resultó en la muerte del turista.
“Eran de madera y no estaban bien enterradas. Solo en un nivel superficial de la arena. Por tanto, no proporcionaron la firmeza necesaria para quienes realizaron el recurrido”, ha manifestado la defensa, que además inciden en que Murilo habría preguntado al equipo responsable, antes del descenso, si soportaría su peso. “¿Soporta mi peso? Mire, peso 160 kilos”, habría preguntado, según João Pedro Monteiro, abogado de la familia, quien además ha denunciado la falta de elementos de seguridad como chalecos y cascos.
“Fue precisamente la causa de la muerte: Sergio Murilo murió por un traumatismo craneoencefálico”, ha explicado, en declaraciones recogidas por Globo.
Tras el suceso, el lugar, ubicado exactamente en la playa de Canoa Quebrada, en la ciudad de Aracati, en Ceará, ha sido clausurado.