Desaparición en Oaxaca genera alarma: ¿Foco rojo?
Un grupo de 14 personas, entre ellas menores de edad, desaparecieron en la costa de Oaxaca.
Desde el pasado 7 de enero, un grupo de 14 personas, entre las que se incluyen menores de edad, desaparecieron mientras viajaban a la costa de Oaxaca. Los familiares de las víctimas solo han recibido información parcial, lo que ha generado gran preocupación tanto en la comunidad local como en redes sociales. De acuerdo con los informes, los desaparecidos viajaban en varias camionetas por la nueva carretera de Oaxaca, en dirección a Puerto Escondido.
El viaje que terminó en incertidumbre
El grupo de amigos planeaba pasar unas vacaciones en la costa oaxaqueña, específicamente en Puerto Escondido. Según el corresponsal Miguel Luna, de Grupo Fórmula, las víctimas se desplazaban en dirección a Río Grande, una población cercana al destino turístico. Fue allí donde, según los familiares, la comunicación con los jóvenes se interrumpió, lo que desató la alerta por su desaparición.
Las autoridades locales ya están investigando el caso, aunque aún no hay detalles concretos sobre las circunstancias que rodean la desaparición. La policía ha iniciado las búsquedas en diversas áreas cercanas a la costa oaxaqueña, pero hasta el momento no se ha encontrado rastro alguno de las personas desaparecidas.
Reacciones y preocupación social
El caso ha llamado la atención en las redes sociales, donde se han compartido mensajes de solidaridad con las familias afectadas y llamados a la colaboración para encontrar a los jóvenes. La incertidumbre sobre el paradero de los desaparecidos también ha generado preocupación sobre la seguridad en la región, que ha sido históricamente conocida por su tranquilidad, pero que en los últimos años ha experimentado un aumento en los actos delictivos.
A pesar de la movilización de las autoridades, la información sobre el paradero de las víctimas sigue siendo escasa. Las familias continúan esperando noticias y se mantienen en contacto con las autoridades para obtener avances en las investigaciones.
Este caso ha puesto de manifiesto la creciente preocupación por la seguridad en ciertas zonas de Oaxaca, lo que ha llevado a muchos a cuestionarse si la región puede considerarse un “foco rojo” en términos de violencia e inseguridad.