Luis Zenteno queda fuera de ceremonia histórica
Delfina Gómez no convocó al alcalde de Teoloyucan.
El pasado 13 de agosto se llevó a cabo la conmemoración del CXI Aniversario de los Tratados de Teoloyucan, un evento que históricamente se realiza en el municipio del mismo nombre, en el Estado de México. La ceremonia reunió a autoridades estatales y municipales, pero llamó la atención la ausencia del presidente municipal de Teoloyucan, Luis Zenteno Santaella, quien no fue convocado por la gobernadora Delfina Gómez Álvarez.
La decisión generó múltiples comentarios entre analistas y asistentes, ya que tradicionalmente la figura del alcalde anfitrión ocupa un papel central en este tipo de actos. Sin embargo, en esta ocasión, el evento se trasladó a Rayón, donde la mandataria estatal invitó a la alcaldesa local, dejando fuera a Zenteno Santaella.
Diversas versiones señalan que la relación entre Delfina Gómez y el alcalde de Teoloyucan atraviesa un momento complicado. El distanciamiento se habría acentuado tras los hechos violentos ocurridos semanas atrás en los que participaron Luis Zenteno y la alcaldesa de Cuautitlán México, Juana Carrillo Luna. Dicho incidente, ampliamente difundido en medios nacionales y en redes sociales, incluyó confrontaciones físicas y hasta detonaciones de arma de fuego, lo que provocó cuestionamientos sobre la gobernabilidad en la región.
Aunque la gobernadora también habría manifestado su inconformidad con la alcaldesa de Cuautitlán, la mayoría de los señalamientos se concentran en el presidente municipal de Teoloyucan. De acuerdo con fuentes locales, Delfina Gómez se mostró especialmente molesta por el episodio y desde entonces ha evitado cualquier acercamiento con el edil.
En declaraciones previas, Luis Zenteno Santaella expresó que el gobierno estatal no atiende sus llamadas y que existe un rompimiento evidente con Palacio de Gobierno en Toluca. Esta falta de comunicación refuerza la percepción de un distanciamiento político que se refleja en la exclusión del alcalde de un acto de relevancia histórica para su propio municipio.
El hecho de que Delfina Gómez eligiera a Rayón para llevar a cabo la ceremonia del CXI Aniversario de los Tratados de Teoloyucan, en lugar de mantener la tradición en el lugar original, se interpreta como una señal clara de su postura frente a la crisis política que atraviesa la región. Para varios observadores, este gesto simboliza no solo un castigo político hacia Zenteno, sino también una estrategia para enviar un mensaje de control desde el gobierno estatal.
En este contexto, la ausencia del alcalde de Teoloyucan en la ceremonia no pasa inadvertida. Al contrario, evidencia la tensión que actualmente caracteriza la relación entre el municipio y el gobierno estatal en medio de un entorno marcado por la violencia y la disputa política.
