¡Escándalo en CDMX! Reo se esfuma del Oriente
Las autoridades de la Ciudad de México reforzaron la seguridad en el Reclusorio Oriente después de la fuga de Marvin Didier Barrientos Flores, de 27 años. El interno enfrentaba proceso por tentativa de homicidio, tras agredir con un tubo y un cuchillo a dos vecinos en la alcaldía La Magdalena Contreras, el pasado 13 de febrero.
El escape se descubrió durante el pase de lista nocturno del martes, aunque se investiga si la evasión ocurrió antes, durante la jornada de visitas. La situación generó un operativo inmediato para ubicar al prófugo y revisar posibles fallas en los controles del penal.
¿Quién es Marvin Didier Barrientos?
De acuerdo con informes oficiales, Barrientos Flores presuntamente colaboraba dentro del reclusorio con la organización conocida como Los Duques, señalada por controlar la venta de insumos y otras actividades ilícitas. Su relación con ese grupo es parte de las indagatorias.
El caso revive las dudas sobre la seguridad en los penales de la capital. En 2023 se registró la fuga de Roberto Alejandro Cámara Ovando en el Reclusorio Sur, quien continúa sin ser localizado. Estos antecedentes mantienen bajo presión a las autoridades penitenciarias.
¿Qué medidas se aplicaron tras la fuga?
La Dirección General de Asuntos Internos inició entrevistas con los custodios que se encontraban de turno y abrió una carpeta de investigación administrativa interna. Tanto el personal como el director del penal quedaron a disposición del Ministerio Público mientras se determina su responsabilidad.
De manera paralela, se analizan las grabaciones de las cámaras de videovigilancia dentro y fuera del reclusorio, con el fin de identificar cómo ocurrió la fuga y detectar posibles omisiones en los controles de supervisión. Con base en esa revisión, se aplicarán sanciones y se establecerán medidas de refuerzo operativo.
Las autoridades capitalinas buscan con estas acciones no solo recapturar a Barrientos Flores, sino también recuperar la confianza en el sistema penitenciario. La fuga del Reclusorio Oriente vuelve a poner sobre la mesa la urgencia de fortalecer la vigilancia en los centros de reclusión y cerrar las brechas que han permitido evasiones en los últimos años.