Investigan presunto feminicidio de agente Stephany Carmona

Stephany Carmona Rojas, agente de la Guardia Nacional originaria de Ajalpan, Puebla, murió dentro de las instalaciones del Batallón 51 en Acapulco, Guerrero, tras recibir dos disparos en la cabeza. La familia y amigos denuncian que se trató de un feminicidio, mientras que autoridades informaron que la joven sufrió un impacto de bala durante una práctica de disparo.

El presunto responsable, identificado como Segundo Sargento Yair Manuel Ramírez de la Cruz, huyó del lugar, lo que motivó operativos de búsqueda y filtros de revisión en aeropuertos y terminales de autobuses de Acapulco para dar con su paradero.

Amigos cercanos señalaron que Stephany había denunciado ser víctima de acoso laboral dentro de la corporación, aunque siempre mostró amor por su trabajo y su deseo de servir al país.

¿Quién encabeza la investigación del caso?

El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, confirmó que la investigación está en manos de las Fiscalías de Puebla y Guerrero, y subrayó que cualquier información relevante se dará a conocer oportunamente, dejando el procedimiento bajo jurisdicción de las autoridades competentes.

Los padres de Stephany acudieron al Ministerio Público en Acapulco para exigir una investigación transparente, con perspectiva de género y sin encubrimientos. La comunidad y autoridades locales también han solicitado justicia, mientras que los sargentos de la Guardia Nacional compartieron fotografías y alertas para localizar al presunto agresor.

¿Cómo despidieron a Stephany en su tierra natal?

El cuerpo de Stephany llegó a Ajalpan la madrugada del jueves, recibido entre aplausos, flores y lágrimas de familiares, amigos y vecinos. Durante el velorio en la colonia Buena Vista, los presentes exigieron justicia con consignas de “¡Justicia para Fany!”.

La misa de cuerpo presente se celebró en la Parroquia de San Juan Bautista, y luego los restos fueron trasladados al panteón municipal, acompañados de una multitud que expresó su dolor e indignación.

La familia y amigos reiteraron que Stephany murió con sueños y metas de servir a su país, y lamentaron que haya perdido la vida dentro de la institución a la que dedicaba su vocación. Su muerte ha generado un clamor ciudadano por esclarecimiento, transparencia y sanción para los responsables, convirtiéndose en un símbolo de la lucha contra la violencia de género dentro de cuerpos de seguridad.

La sociedad, autoridades y medios siguen atentos a los avances de esta investigación que busca esclarecer lo sucedido y garantizar justicia para Stephany Carmona Rojas.

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